La clasificación arancelaria es uno de los pasos más importantes en cualquier operación de comercio exterior. Se trata de asignar un código numérico llamado fracción arancelaria a tu producto, con base en sus características, materiales y uso.
¿Y por qué es tan importante? Porque de este código depende todo:
✅ Qué impuestos pagas
✅ Qué permisos necesitas
✅ Qué regulaciones aplican
✅ Si puedes beneficiarte de un tratado internacional
¿Cómo funciona?
México utiliza el Sistema Armonizado de la Organización Mundial de Aduanas (OMA).
Cada producto se clasifica con una fracción arancelaria de 8 dígitos, por ejemplo:
0804.40.01 = Aguacates frescos
Este número determina si tu mercancía necesita:
-
Pago de arancel
-
Permisos sanitarios (como SENASICA o COFEPRIS)
-
Cumplimiento de Normas Oficiales Mexicanas
-
Aplicación de arancel preferencial bajo algún tratado (T-MEC, TLCUEM, etc.)
¿Cómo hacerlo bien?
Estas herramientas te pueden ayudar:
-
Buscador Arancelario del SAT
-
TIGIE (consulta la fracción oficial y sus requisitos)
-
Asesoría especializada: muchos agentes aduanales o consultores hacen dictámenes de clasificación que te dan certeza legal.
En resumen
Clasificar correctamente tus productos es más que un requisito técnico:
Es la base de una operación segura y sin sorpresas.
Tómalo en serio, evita errores y asegúrate de tener el respaldo adecuado.
En CLI Grupo te ayudamos con asesoría experta en clasificación, permisos y logística internacional.
0 Comentarios